El retrato del caudillo
Letra de la canción El retrato del caudillo
Desde que era yo un chamaco no he olvidado la emoción
Que dejó en mi tierna mente mi abuelito filemón.
Yo jamás lo vi en persona, pero guardo su impresión
Por retratos de la sala de mi abuela concepción.
Aun recuerdo aquel enorme, de tamaño natural.
Mi abuelito de uniforme, que creí de general.
Por acá tenía su gorra y esta mano en un sillón.
Su mirada muy cotorra, muy de la revolución.
Entre más de cien retratos había un grupo singular
De mi abuelo y unos batos que cargaban un costal.
Luego aquel junto al librero, que mi abuela me negó,
Donde estaba con madero cuando un sobre le entregó.
Y esa foto, ya amarilla, de mi abuelo ¿con quien creen?
Nada menos pancho villa. por detrás tenían un tren.
Mi abuelita se adornaba: ‘ve a tu abuelo y a obregón’.
‘y a carranza que ahí andaba, nada más que no salió’.
Para mí, mi candidata, fue una foto de perfil,
Donde estaba con zapata, sosteniéndole el fusil.
Un papel, el guerrillero, lo leía con atención.
Sus bigotes de aguacero y su ceño fruncidón.
Pero si algo molestaba era un tipo sepulcral,
Que de reojo fisgoneaba lo que leía el general.
Luego supe que mi abuelo nunca estuvo en una acción,
Porque siempre fue cartero, pero en la revolución.